Feito, Luis.
Obras del artista.
Luis Feito nació en Madrid en 1929. Es un pintor que formó parte del Grupo El Paso y se considera una de las figuras más importantes del arte español contemporáneo. [+]
Feito, Luis
Luis Feito nació en Madrid en 1929. Es un pintor que formó parte del Grupo El Paso y se considera una de las figuras más importantes del arte español contemporáneo.
Luis Feito empezó a dedicarse a su carrera artística en 1950, cuando ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Pero su trayectoria bien definida se inició con un breve período figurativo que terminó cuando a través de una experiencia cubista se adentró en la abstracción hacia 1953.
En 1954 Luis Feito realizó su primera exposición individual de tendencia no figurativa en la Galería Buchholz y también en la Galería Fernando Fe, ambas de las pocas galerías modernas de Madrid.Y en 1955 realizó su primera exposición en París, en la galería Arnaud, donde a partir de entonces, Feito expondría durante 25 ños. Este mismo año obtuvo una beca del gobierno francés y se trasladó a vivir a París. Fue durante este periodo que se influenció del automatismo y, en especial, de la pintura matérica, que le llevó a trabajar con pasta de óleo y arena, dentro de una paleta de colores formada por blancos, negros y ocres.
Tras su estancia en París, Luis Feito al ver que el movimiento artístico español no había evolucionado formó, junto a otros artistas y críticos de arte, el Grupo El Paso. Éste fue uno de los primeros movimientos vanguardistas de la España de posguerra que introdujo las premisas del informalismo y el expresionismo abstracto
Tras las exposiciones realizadas con el grupo El Paso y con las individuales en las Bienales de Venecia de 1958 y 1960, llegó el reconocimiento internacional. Hacia el año 1962, Luis Feito introdujo un cuarto color, el rojo, que utilizó en estructuras y motivos circulares. A partir de 1963, su obra tendió hacia una simplificación formal y material, con motivos circulares. Pero en los años setenta se impusó el color y la geometrización, que culminó al finalizar la década en su depurada etapa de cuadros blancos. En 1981 abandonó París y se trasladó a Montreal hasta 1983, año en el que fijaría su residencia en Nueva York hasta primeros de los noventa.
