Guinovart, Josep
Pintor, dibujante, grabador, artífice del tapiz, ilustrador, muralista, realizador de instalaciones y escultor nacido en 1927 en Barcelona y fallecido en 2007 en la misma ciudad.
A los 14 años comenzó a trabajar como pintor de paredes, ingresando después en la Llotja.
En 1948 realizó su primera exposición en las Galerías Syra de Barcelona consagrándose por entero a la pintura a partir de 1951. Un año después, tras haber contactado con el Grupo Dau al Set (en la ilustración de alguna de cuyas revistas llegó a colaborar) obtuvo una beca para estudiar en París. A su regreso, se dedicó activamente a la realización de encargos de arte mural, decoraciones y figurines para obras teatrales, trabajos de ilustración, diseño de carteles, etc.
A partir de 1976 hay que añadir a sus anteriores ocupaciones la de grabador, pues emprendió la ejecución de varias ediciones de litografías y aguafuertes para la Editorial Polígrafa de Barcelona.
Desde 1948, fecha en que presentó su primera exposición individual, se sucedieron apretadamente sus exposiciones en Barcelona, Madrid, Palma de Mallorca, Valencia, París, Nueva York, Basilea, Chicago y en otras muchas ciudades españolas, europeas y americanas, al igual que su participación en exposiciones de arte contemporáneo catalán y español, salones, la Bienal Hispanoamericana, la Bienal de Venecia y otros encuentros internacionales de arte de vanguardia. También ganó distintos premios como el Premio Nacional de las Artes en 1982, el Premio de Artes Plásticas que la Generalitat de Catalunya le concedió en 1990 o el distintivo oficial de L'Ordre des Arts et des Letres que le otorgó el estado francés en 1997.
La obra de Guinovart evolucionó a partir de una interesante etapa figurativa, con influencias surrealistas y cubistas, en la que cristalizaron telas memorables por su nobleza de factura y genuino vigor popular, entre las cuales pueden citarse Sorpresa (1951) y Familia (1952). Las corrientes abstractas y el informalismo abrieron nuevas perspectivas en la estética de Guinovart, que empezó a incorporar a su quehacer todo el potencial de recursos de una manipulación libre de la materia y del objeto, iniciando una serie de experiencias a bases de estructuras de madera quedmada, bidones, objetos de desecho, cajas, revestimientos polícromos, juegos de alusiones, signos, formaciones materiales, etc., generándose así un diálogo entre la expresión plástica y subjetiva del artista y su entorno vital, sus símbolos, fantasmas y contradicciones.