Hérnandez Pijuan, Joan
Joan Hernández Pijuan nació en Barcelona en 1931 y murió en 2005 en la misma ciudad.
Inició su formación como pintor en 1945 estudiando en la Llotja de Barcelona durante dos años. Unos años después, en 1957 se trasladó a París donde estudió grabado y litografía en la Escuela de Bellas Artes. Durante su estancia en la capital francesa entró en contacto directo con el arte informalista, corriente artística en la que se enmarcarían las obras que realizó Pijuan durante los años 60.
A partir de 1966 Pijuan empezó a interesarse por las superficies vacías y la relación que hay entre el espacio y el objeto. Además se acercó al género de naturaleza muerta, sobretodo, en obras en las que incorporaba un trozo de manzana, un huevo o una copa.
En 1972 empezó a tratar el tema del paisaje. Al inicio usaba la regla y los espacios milimetrados pero después la vivencia del paisaje real hizo que acentuara la ficción de la perspectiva con texturas, degradados, etc.
En 1976 investigó el color, la luz y el movimiento sobre el espacio delimitado de un paisaje. Asimismo, este año fue contratado como profesor en la Escuela Superior de Bellas Artes de Sant Jordi.
Durante los años 1981 y 1982 Pijuan desarrolló una serie donde su preocupación fue la disposición del color sobre el soporte. Además, durante los años 80 siguió experimentando a través de su pintura. De esta forma, durante estos años su pincelada abandonó la inmediatez y aparecieron recorridos a partir de pequeñas manchas que establecían trayectos visuales. El paisaje pasó a configurarse como la globalidad de aquello particular y pasó a hacer alusión a plantas y flores. Durante esta época Pijuan empezó a trabajar la serie de \"ciprés\".
En 1989 lo nombraron catedrático de pintura de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Barcelona.
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En los años noventa, Pijuan trabajó sobre grandes superficies y sin apenas elementos iconográficos. A partir de una masa central de óleo y esmaltes industriales, esparcía la materia y la modulaba sobre la tela, dejando zonas muy densas en el centro y otras sin apenas textura, en los bordes del lienzo. La luz y la oscuridad se disputaban el espacio ocupado y el vacío. Toda esta superficie era surcada por líneas que se entrecruzaban a modo de malla metálica o de caminos encontrados.
En el año 2000 nombrado académico de la Real Academia de San Fernando de Madrid y en 2005 Pijuan falleció
Durante su carrera artística Pijuan recibió distintos premios como el Premio Nacional de Artes Plàsticas (1981), la Creu de Sant Jordi (1985), el Premio Ciudad de Barcelona (2004) o el Premio Nacional de Arte Gráfico (2005). Además sus obras se encuentran en distintos museos nacionales e internacionales como el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el museo Guggenheim de Nueva York, la Yamaguchi Gallery de Osaka den Japón o el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, entre otros.